jueves, 26 de febrero de 2009

Macas, su selva y "boying" por el Upano

Pues si, salí de Cuenca hace ya 6 días, no sin antes ir a ver un parque nacional que había cerca llamado Cajas.
Un parque considerado como un humectal protegido o algo así. Vamos, que esta lleno de lagunas (fotos) y lo que llaman busque húmedo (foto)
Esta vez me toco irme sola pero justo por eso fue mucho más aventura mi salida.
Estuve caminando como 5 horas en medio de lluvia constante. A veces en plan diluvio a veces solo garuando (como se dice aquí al chirimiri) pero el caso es que no me dejó en ningún momento la dichosa lluvia. Y ahí yo, anda que te anda, resbalándome, cayéndome y con el barro hasta las rodillas de vez en cuando y pensando "como mi tobillo ceda, de aquí no me saca ni MacGyver". Y es que estaba sola, sola y el parque en sÍ es meeeega enorme
Pero no hubo nada que lamentar porque tras 5 horas de caminata y ver bastantes lagunas, todas de ellas hermosas y ver ese curioso bosque húmedo, conseguí salir a la carretera, tal y como estaba previsto. Parecía que salía del los bosques de Vietnam en plan Rambo, por las pintas que llevaba.
Lo cierto es que hacer algo así sola me hizo sentir genial cuando terminé. Que viva la naturaleza!

Y de ahí tras pasar un día más en Cuenca esperando para lavar la suuucia ropa, puse rumbo nocturno a Macas. Ciudad donde me encuentro ahora, pero ya por poco porque mañana mismo parto hacia Baños de Ambato. Una ciudad bien turística (eso dicen) en la parte de sierra. Así que dejare atrás otra vez este plácido clima amazónico que tanto se disfruta para dar paso al frio serrano. Brrrr, q pereza!

Y que puedo decir de Macas... pues que vine con que para empezar mi aproximación a la selva y para asistir al carnaval y a un festival de muisca rock y reggae que había este finde... y no he hecho mas que una de las 3 cosas. Lo de la selva, pero eso ha sido excluyente con el carnaval y el festival. Porque resulta que aunque llegué el viernes por la mañana y ese mismo día me hice amiguita de un artesano que había en la plaza con el que salí de noche a tomar algo (con lo que así ya tenia amiguitos para pasar el carnaval y el festival acompañada), pues al día siguiente cuando seguía preguntando precios para tours por la selva... me encontré con un guía que iba a llevar a un grupo de 4 italianos y 2 quiteñas ese mismo día a la selva!! Era un tour de 4 días. Así que si iba se acabó el carnaval porque duraba justo 4 días.
Pero no podía dejar de aprovechar la oportunidad pues aquí no hay muchos extranjeros (por no decir que ninguno!) así que me estaba resultando muy difícil conseguir un tour a buen precio.
Así que dije adiós al carnaval y hola a la selva, esta vez de verdad y sin mosquitos. Yujuuu.
Dije hola a la cueva del Pastaza o de los Tallos (por acoger a unos pájaros nocturnos llamados Tallos que hacen un ruido como graznidos que da miediito). Una cueva en la que estuvimos como 2 horas de ida (y 2 vuelta, claro esta) andando. Era como hacer espeleología en toda regla pues íbamos cada uno con nuestra linterna y tuvimos que andar, saltar, nadar... uff, que fría estaba el agua. Vimos tallos, murciélagos, estalactitas/mitas, arañitas... en fin, que fue la leche. Y sin encontramos a nadie!
En esos 4 días también estuvimos con una comunidad Shuar. Dicen que era una de las culturas más guerreras del amazonas. Tenían el "hábito" de reducir cabezas. Aunque ahora eso esta suuper prohibido y penado porque al parecer incluso han desaparecido turistas y locales que luego aparecían por ahí sin cabeza... Y es que tiene un precio muy elevado en el mercado negro :S
Ahora ya no hacen eso (o eso dicen) y como no son un pueblo muy agradable con sus vestidos, su música (foto), comida típica (como el ayampaco*). Son gente que vive de la naturaleza y que nunca va al medico porque no les hace falta ya que nunca enferman y si lo hacen lo curan todo con plantas. La gente vive más de 100 años por allá y tienen como 10-15 hijos por familia. Pueden tener hasta 5 mujeres!
En fin, que os podría contar mil cosas sobre lo visto y escuchado de costumbres y plantas y demás... pero no es plan.
También subimos rio arriba en canoa, caminamos por la selva de día (foto), y de noche!, conocimos un chamán con el que probamos bebida de ayahuasca, caminamos hasta una cascada "sagrada" (que sagrada no se, pero el agua de friiia... que yo ni me metí!), vimos un montón de plantas medicinales, flores de vívidos colores, insectos a mares, hormigas mortales, algun que otro animalejo raro (foto), árboles de esos que no se abarcan ni con muchas personas (foto), lianas para hacer el tarzaaaaán, probar frutos y plantas que se supone que se comen... y todo esto aderezado de barro en casi todo el camino hasta niveles indescriptibles. Cada paso había que pensarlo para no perder la bota en el intento.
Y tuve la mala suerte que me caí en el justo cuando quedaban 100 metros para llegar al taxi el último día. Y me caí de culo, hasta la cintura vamos, jajaja.
Y yo que creí que me iba a escapar... Que ilusa. Menos mal que era el final!
Y aunque no estuvimos en el carnaval, no nos libramos del todo de él porque en todos lados la gente "jugaba a carnaval". O sea, que te tiran agua y maicena en cuanto que te descuidas. Así que cada vez que encontrábamos gente... miedito, jajaja

Han sido 4 días de gran diversión y buena compañía. Fue una gran elección y suerte la mía.
Además ellos viven en Quito así que ya tengo plan para este finde, ;)

Y bueno, regrese ayer por la noche a la ciudad y que raro se nos hizo a todos que estuviera todo asfaltado y sin barro...
Y hoy mi idea era tomarme el día de relax y lavar ropa para salir hacia Baños esta tarde pero al ir a despedirme de mi amigo artesano (e instructor de boying) me dice... "pero no querías probar el boying"? A lo que no he podido decir que no.
Y el boying consiste en bajar un río en el que normalmente se hace rafting pero con un neumático enorme de esos negros. No era normal de camión o eso creo yo, porque tenia formita rara, pero lo que se es que han sido casi 3 horas que uff, yo creí que me moría en tramos.

Tantas horas en al agua me han hecho tiritar como nunca en mi vida. Había piedras, rápidos que nos han tirado al agua una y otra vez... y todo esto así a pecho lobo encima del neumático. Alucinante la adrenalina. Me he vuelto creyente del todo durante el trayecto. Creí que me mataba, jajaja.
Pero no, solo me he dado un golpe en el muslo izquierdo que me tiene medio coja pero nada más. Tras una ducha de agua caliente de como 1 hora, todo ha vuelto a la normalidad. Pero claro, lo de viajar justo después... como que ni ganas. Así que aquí me quedo esta noche para tomar algo con Landi (el artesano) y descansar, hasta mañana en que dejaré con pena esta linda zona que me ha hecho pasar tan buenos momentos.
Y sí, con esto (creo que) puedo decir que ya me he quitado la espinita de la selva así que ahora ya solo volcanes, ciudades y costa... que no es poco ;)

Hasta pronto!

Ayampaco* = Comida típica de la zona que consiste en enrollar y sazonar algo de verduras (como el palmito) y carne o pescado en una hoja de palmera enooorme y cocinarlo en su propio jugo asi en las brasas. Y luego te lo sirven en la propia hoja, claro esta.

1 comentario:

Los Gallegos dijo...

Jodo niña, cómo te lo pasas!!!

La verdad es que cuando estás en medio de la nada acompañado únicamente por tu mochila, se siente uno ridículamente pequeño y vulnerable; y después de volver te crees un superheroe... jajaja.

No me digas que el neumático que utilizaba papá para meterse al pantano se ha convertido en un deporte de aventura!!!! Al menos llevarías casco y chaleco ¿no?

Yo ando en Hamburgo con Rita esperando las ganas de salir a comprar la comida o buscar un restaurante, pero es que hace frío y está lloviendo...

Besazos